En el 2017 se publicó una investigación dirigida por Ana Gordoa, investigadora del Centro de Estudios Avanzados de Blanes (CEAB) del CSIC sobre el mal manejo del etiquetado en la venta de atún en Cataluña.
En varios casos, se usó la remolacha para “tinturar” de rojo el atún. Este pez es altamente cotizado por ser escaso en el atlántico debido a la sobrepesca, razón principal de su alto precio en el mercado.
La falta de control en el etiquetado y en la trazabilidad de la pesca, permitió que un alto porcentaje de pescaderías y restaurantes usen la tintura de la remolacha para vender este pescado a mayor precio en un mercado saturado y sobre explotado.
Este caso ejemplifica la problemática de la sobrepesca a nivel global.
Desde inicios del siglo XX el ser humano ha extraído de forma indiscriminada peces y mariscos de nuestros océanos. Esto ha provocado el declive de las poblaciones. Acorde a información de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) el 80% de las reservas pesqueras han sido extraídas hasta su cuota máxima; llevando a especies como el atún rojo, al borde de la extinción. ¿La solución? Educación, consciencia, regulación y muchísimo control local, regional e internacional.
Los principales causantes de la sobrepesca son la pesca ilegal y el uso de formas de pesca insostenibles como la pesca de arrastre. Una técnica que utiliza una red lastrada que barre el fondo marino, llevando dentro de esta todo lo que encuentra en el camino.
Existen varios mecanismos pueden apoyar la conservación de los recursos marinos y la biodiversidad, pero se debe exigir que sean implementados con urgencia y mucha rigurosidad.
El primero es la disminución de forma drástica de la pesca de especies que están amenazadas; como el bacalao, atún, langostinos, lenguado, mantas y rayas, merluzas, pez espada, salmón, tiburón y algunos más. (La lista completa de Greenpeace pueden verla aquí).
El segundo, es la implementación de un sistema de cuotas de pesca, temporadas y trazabilidad en el manejo de recursos pesqueros en los mercados. Además de una urgente campaña de educación y concientización social acompañada por un sistema de etiquetado transparente.
Actualmente, no existe ningún tipo de control de etiquetado para el Ecuador. Un ejemplo muy cercado es el que vivimos en Quito, donde el tiburón se comercializa como corvina, picudo, atún, cherna, tollo y tinto. Esto acorde a un estudio de ADN en el DMQ donde se descubrió que el 26,67% de los pescados identificados son especies de tiburón. (Aquí pueden ver el informe)
Y, entonces, ¿qué tienen en común la remolacha, el atún y los engaños? La urgente necesidad de consciencia, control y trazabilidad. En una sociedad con poco conocimiento y educación sobre estas problemáticas, el engaño y la falta de control sobre los alimentos que se comercializan es muy fácil.
Por eso he querido conversarles sobre este tema en esta nueva receta, porque cuando nos alimentamos estamos haciendo un acto a favor o en contra del planeta que queremos tener y dejar a nuestros hijos. Hay una deuda por parte del Estado, eso es claro. Pero también hay una responsabilidad por parte del consumidor en cuanto a conocimiento. Hay mas información de la que mucha gente te muestra, hay que investigar más allá de las redes, de los documentales y de los posts. Si no usamos la información para investigar por nuestra cuenta y a profundidad, estamos cayendo en lo mismo que nos ha llevado al colapso, creer en lo que nos dicen sin analizarlo e investigarlo por nuestra cuenta.
Así como existe explotación de recursos pesqueros, existe explotación de recursos agrícolas y la respuesta no es dejar de consumir todo; es saber consumir, exigir y convertir al alimento en la mejor arma contra la sobre explotación del planeta. Necesitamos buscar el equilibrio para encontrar el camino al cambio YA.
Mientras ven los informes que les dejo (y buscan por su cuenta muchos más), comparto con ustedes una receta deliciosa para una sencilla ensalada casera con remolacha puesta a buen uso😉.
ENSALADA DE REMOLACHA
TIPO DE PLATO
Diario/ vegano/local
ORÍGEN
Zona costera Norte del África pero se cultiva en Ecuador
TIEMPO DE PREPARACIÓN
30 minutos
TIEMPO DE COCCIÓN
20 minutos
TIEMPO TOTAL
1 hora aproximado
CANTIDADES
4 porciones
AUTOR
María Fernanda Burneo
IMPACTO Y HUELLA
Baja. Producción 100% local
Cero proteínas y uso de productos 100% locales
PRODUCTORES LOCALES RECOMENDADOS
Aceite de Oliva al peso en Te Quiero Verde o Juan Granel
Remolacha uso la de mi huerta pero pueden encontrar las de Finca Palugo
Esta es una receta de ensalada casera muy rápida.
INGREDIENTES
2 remolachas
1 limón
1 cucharada de aceite de oliva
2 dientes de ajo
Sal y pimienta
INSTRUCCIONES
1. Pones las remolachas a cocer en agua por un aproximado de 20 minutos o hasta que se suavicen. Otra opción es cocerlas peladas, en el horno bajo (150º /200º) con aceite de oliva, sal y pimienta; cubiertas con papel encerado, durante 1 hora o hasta que estén suaves.
2. Una vez cocinadas, deja enfriar, las pelas y cortas en cuadrados..
3. En un recipiente hondo pon los dos dientes de ajo, el zumo de limón exprimido, aceite de oliva, sal y pimienta.
4. Luego agregas la remolacha picada en cuadraditos para que repose unos 5 minutos
4. Una vez que ha reposado, agrega aceite de oliva, sal y pimienta y ¡sírvelo!
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